La Costa Brava es un sitio con vistas impresionantes y únicas en el mundo, así que no es de extrañar que los paisajes que la conforman hayan sido los principales protagonistas de postales, cuadros e incluso películas.
Hoy hablaremos de una serie de largometrajes que han sabido aprovechar el conjunto de paraísos naturales con los que cuenta la nuestra costa para rodar icónicas escenas de películas que ya forman parte de nuestro rico patrimonio cultural.
Tengo ganas de ti
La primera película de esta lista es “Tengo ganas de ti” (2011), la segunda parte de la taquillera película “3 metros sobre el cielo” (2010). El director Fernando González Molina escogió el Puente de Gómez para rodar una de las escenas clave donde la pareja de amantes protagonistas, Hache y Gin (interpretados por los populares actores Mario Casas y Clara Lago), llegan en moto hasta este destino. Además la belleza de esta escena se ve potenciada gracias a la luz lunar de la noche.
El puente que hemos mencionado fue remodelado en 1916. Además, esta construcción forma parte del conjunto de once puentes que cruzan Gerona. Esta edificación, compuesta por un solo arco, también es conocida como “El puente de la Princesa” y atraviesa el río Onyar. No obstante, el origen de su nombre se lo debe a Miguel Gómez, el que fue el propietario de esta edificación durante años. Este puente se ha convertido en un sitio icónico gracias a esta película. Desde que se estrenó en los cines, el puente está repleto de candados (de todos los colores y medidas) con nombres de parejas en ellos. De hecho, el ayuntamiento se ve obligado a retirar los candados de manera periódica para que estos no se acumulen.
La segunda ubicación que aparece en esta adaptación cinematográfica del libro de Federico Moccia son los alrededores del Barrio Antiguo de Gerona. Este barrio ha sido declarado un Bien Cultural Histórico y Artístico de Interés Nacional. Entre la riqueza arquitectónica de este lugar encontramos el monasterio románico de Galligants, la iglesia de Sant Narcís, o las casas del río Onyar. Por último, también encontramos los baños árabes, una construcción románica del siglo XII inspirada en los baños romanos donde podemos hallar una piscina central y una cúpula en el interior del patio que se alza sobre estrechas columnas de un color blanco roto (que también cuenta con capiteles de una fisonomía bastante peculiar).
8 apellidos catalanes
Ahí va una pequeña adivinanza: ¿Relacionas las palabras “vascos” y “catalanes”? Exacto, también hablaremos de la película “8 apellidos catalanes” (2015), que es la secuela de “8 apellidos vascos”. Para el rodaje se decidió adoptar como plató oficial varios espacios de la Costa Brava. Uno de los lugares escogidos fue Monells (Baix Empordà), un pueblo del que ya hablamos en un artículo anterior.
No obstante, esta no fue la única ubicación, ya que los localizadores también escogieron los siguientes lugares para la producción de la película: Forallac-Vulpellac, Llagostera y Palafrugell. Sin caer en spoilers, hablaremos de la primera localización mencionada. El Castillo de Vulpellac es una fortificación del siglo XIV caracterizada por su arquitectura gótica y renacentista donde se rodó una de las escenas más importantes del filme en relación con una boda.
En Llagostera, se rodaron escenas en la Masía de Can Llambí, una edificación familiar perteneciente al siglo XII donde se realizó la foto que se usó para presentar este fenómeno filmográfico en los medios. Por último, en Palafrugell se rodaron algunas escenas de la comisaría policial del lugar. La verdad es que el director Emilio Martínez-Lázaro no solo hizo un gran trabajo durante el rodaje, sino que también contó con un reparto de la talla de Clara Lago, Dani Rovira y Rosa Maria Sardà. Asimismo, también contó con el comediante Berto Romero.
Últimas tardes con Teresa
La última pieza cinematográfica de la que hablaremos es “Últimas tardes con Teresa”, un filme de 1983 que fue inspirado en la novela homónima de Joan Marsé. El relato de la historia transcurre en Cataluña (durante los años 50).
Entre las afortunadas localizaciones escogidas para el rodaje de esta producción encontramos la playa de Blanes y Segur. La verdad es que el director de esta obra encontró en la playa de Segur de Calafell el sitio idóneo para grabar varias escenas gracias a los espectaculares escenarios que encontramos en esta localidad.
La playa que encontramos está formada por arena fina y su longitud es de un kilómetro y medio. Además, encontramos duchas, hamacas, alquiler de parasoles, acceso para personas con movilidad reducida, aseos y hasta una zona infantil.
No se queda atrás la playa situada en Blanes, uno de los primeros pueblos de la Costa (por este motivo también es conocido como “El Portal de la Costa Brava”). Blanes es un antiguo pueblo marinero en el que se encuentra una de las playas más largas dentro del litoral de Gerona: S’Abanell. Esta supera los 2.380 metros y acaba en el río Tordera. Tiene un ancho de 32 metros y está constantemente expuesta al cambio temporal, por lo que la arena que hay en la playa varía según las estaciones del año.
Es extraordinario ver cómo los directores de estas piezas cinematográficas se enorgullecen de las ubicaciones que ofrece la Costa Brava. Si quieres tener un viaje de película, recuerda que en GHT Hotels tenemos más de 10 hoteles distribuidos por toda la costa donde podrás hospedarte cuando dé comienzo la temporada 2021. De momento… ¡disfruta de las fiestas! ¡Feliz Navidad!