Hoy te traemos nuestro particular TOP 5 de El Port de la Selva, cinco lugares que no te puedes perder si tienes la oportunidad de visitar este encantador rincón de la Costa Brava. ¡Toma nota!
Antes de comenzar…
Antes de revelarte cuál es nuestro TOP 5, queremos hablarte de El Port de la Selva en términos generales.
Este pueblecito se halla al norte del Cap de Creus (Alt Empordà), a unos 33 km de Figueres y a 70 km de Girona. Muy cerca de aquí hay otros dos pueblos que también te recomendamos conocer y que, irremediablemente, te robarán el corazón: Cadaqués y Roses.
El Port de la Selva destaca por haber mantenido intacta su tradición pesquera, por sus casitas blancas y por su tranquilidad, ya que ha logrado permanecer relativamente alejado del turismo de masas tan habitual en esta zona del litoral.

Calas y playas
En El Port de la Selva hay más de treinta calas y playas, entre las que se encuentran algunas de las mejores de la Costa Brava.
La oferta es insuperable. Podrás ver desde grandes playas con arena fina hasta pequeñas y encantadoras calas de rocas escondidas y rodeadas de acantilados.
Eso sí, todas ellas se caracterizan por tener unas aguas muy limpias que, verano tras verano, hacen las delicias tanto de los visitantes como de la gente local.
Cala Tavallera, Cala Cativa, Cala Corquell, Cala Fornells, Cala Galera, Cala Galladera, Cala Medusa, Cala Prona, Cala Serena, Cala Torta, Platja d’en Balleu, Platja d’en Pere Esteve, Platja d’en Robert, Platja de les Clisques, Platja de les Violetes, Platja de Vaquers, etc.
Con tal cantidad de playas y calas, seguro que das con una que cumple los requisitos para que pases un agradable día disfrutando del mar y del sol cuando llegue la temporada 2022.

El Monasterio de Sant Pere de Rodes
Además de relajarte en las playas y las calas de El Port de la Selva, también puedes conocer su magnífico patrimonio arquitectónico.
Una de sus obras más importantes es el Monasterio de Sant Pere de Rodes, que se alza majestuosamente en la montaña de Verdera, a las afueras del pueblo.
Este conjunto monumental formado por el castillo de Verdera, el antiguo pueblo de Santa Creu de Rodes y el propio monasterio, está declarado Bien Cultural de Interés Nacional.
El Monasterio de Sant Pere de Rodes fue construido a finales del siglo IX como un modesto edificio y, poco a poco, fue creciendo hasta alcanzar su máximo esplendor durante los siglos XI y XII.
Se encuentra en muy buen estado y en él destacan su iglesia y sus torres de defensa. Es todo un exponente del románico catalán.
No te vayas sin disfrutar de las espectaculares vistas panorámicas de la bahía de Llançà que se obtienen desde su mirador.

El castillo de Verdera
El siguiente punto de interés está situado en la montaña más alta de la sierra de Rodes (a 670 m sobre el nivel del mar), en pleno Parque Natural del Cap de Creus.
Nos referimos al castillo de Verdera, una fortificación medieval hasta la que se puede llegar caminando desde el Monasterio de Sant Pere de Rodes. Si eres aficionado al senderismo, te lo pasarás genial recorriendo este tramo que se alcanza, aproximadamente, en treinta minutos.
El castillo había sido donado al monasterio por los condes de Empúries pero, dado su valor estratégico, estos intentaron recuperarlo en varias ocasiones.
En la actualidad, el castillo de Verdera está en ruinas. Únicamente se conserva una antigua iglesia románica, una torre de planta rectangular y una parte de las murallas que cerraban el recinto.
Dentro del castillo, el terreno mantiene la pendiente y los desniveles naturales de la montaña. En la parte exterior verás una cisterna de siete metros de largo por cuatro metros de ancho cubierta por un arco apuntado. Esta servía para almacenar agua y su presencia era muy frecuente en los castillos medievales.
Sin duda, el castillo de Verdera es un lugar espectacular que te dejará sin palabras.

Faro de Punta s’Arenella
Al final de la bahía de El Port de la Selva te toparás con el Faro de s’Arenella. Se trata del primer faro que encontramos en la Costa Brava por el norte.
Fue inaugurado en 1913 y está enclavado en un paraje de gran belleza natural a una altura de veintidós metros sobre el nivel del mar.
Su estructura se compone de una casa y de una torre cuadrada con cúpula. Como curiosidad te contaremos que el edificio original sirvió como modelo para otros faros construidos a principios del siglo XX como, por ejemplo, el Faro de Tossa de Mar. Por ello, se suele decir que estos faros son casi gemelos.
Acceder al faro no tiene mucha complicación. Lo conseguirás bastante rápido y con total facilidad si tomas el camino de ronda que llega hasta él. Durante el trayecto tendrás ante ti un paisaje espectacular repleto de playas y acantilados. Cabe decir que hay una zona de parking, por lo que también es posible acercarse con vehículo.

La Iglesia de Santa Maria de les Neus
Para finalizar, te sugerimos ir a la Iglesia de Santa Maria de les Neus.
La iglesia fue construida en 1944. Años más tarde sufrió una ampliación y modernización en forma de cruz latina. Desde fuera se aprecian con claridad la nave antigua y las ampliaciones que se hicieron.
Es de estilo barroco y está situada en el centro histórico. Cuenta con una torre con campanario y reloj que sobresale entre las casas de los vecinos. La fachada está pintada de blanco y presenta un diseño muy sencillo, sin apenas elementos decorativos.
Ya en el interior, te llamarán la atención las paredes de obra vista del altar mayor. Las capillas laterales carecen de altares. Sin embargo, las imágenes están puestas en pedestales. En ella se venera la imagen gótica de Sant Pere, procedente del Monasterio de Sant Pere de Rodes.
Como no podía ser de otro modo, la Iglesia de Santa Maria de les Neus está incluida en el Inventario del Patrimonio Arquitectónico de Cataluña.

Interesante, ¿verdad? Te animamos a organizar este fin de semana una excursión con tu familia o tus amigos para que disfrutéis juntos de estos y de otros tesoros que se esconden en El Port de la Selva.
Leave A Reply