Tras los excesos de las fiestas navideñas, no hay mejor manera de volver a la rutina saludable que disfrutar de rutas deportivas al aire libre y la Costa Brava y el Maresme ofrecen planes inigualables. Desde senderismo hasta ciclismo y running, hay opciones para todos los gustos. Acompáñanos a descubrir algunas de las mejores rutas para quemar calorías mientras disfrutas de entornos inolvidables.
Senderismo en el Camino de Ronda
El Camino de Ronda, que conecta diversas playas y calas de la Costa Brava, es una opción perfecta para quienes buscan combinar ejercicio con paisajes de postal. Una de las rutas más populares es la que une Calella de Palafrugell y Llafranc, un recorrido fácil de aproximadamente 2 km que atraviesa acantilados, bosques de pinos y miradores con vistas al Mediterráneo.
Para quienes prefieren un desafío mayor, el tramo entre Platja d’Aro y Sant Feliu de Guíxols ofrece unos 10 km de caminos sinuosos que alternan playas escondidas con tramos rocosos. Además de quemar calorías, este sendero te permitirá disfrutar de la flora autóctona y del aire puro de la Costa Brava.
Running por el Paseo Marítimo de Pineda de Mar
El Paseo Marítimo de Pineda de Mar, en el Maresme, es un lugar ideal para correr, especialmente para principiantes. Este tramo llano, que bordea la playa, cuenta con un recorrido de 5 km ida y vuelta. La brisa marina y las vistas al amanecer hacen que cada zancada sea un placer.
Para quienes buscan un desafío más intenso, la ruta hacia Malgrat de Mar incluye ligeros desniveles y zonas más tranquilas, ideales para mejorar el rendimiento físico mientras se disfruta del entorno costero.
Ciclismo en el Parque Natural del Montnegre y el Corredor
En el corazón del Maresme, el Parque Natural del Montnegre y el Corredor es un destino favorito para los ciclistas. Este espacio protegido ofrece rutas variadas, desde paseos relajados hasta exigentes ascensos por caminos forestales.
Una de las rutas más recomendadas parte desde Sant Celoni y sube hasta la ermita del Corredor, un recorrido de 20 km que combina naturaleza, historia y vistas panorámicas del entorno mediterráneo. El esfuerzo se ve recompensado con un descenso lleno de adrenalina.
Deporte y bienestar en cada paso
Las rutas deportivas de la Costa Brava y el Maresme no solo son una oportunidad para mantenerse en forma, sino también una invitación a desconectar y reconectar con la naturaleza. Tanto si eres un deportista experimentado como si buscas empezar el año con hábitos más saludables, estas rutas te esperan con paisajes de ensueño y la motivación perfecta para dejar atrás los excesos navideños.
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