Lo bueno del arroz es que todo el mundo puede encontrar su combinación ideal: de marisco, con costilla, «socarrat o caldós», de erizos de mar o de bogavantes, de alcachofa o berenjena, mixta o purista… Lo dicho, los hay para todos los gustos. En la lista de hoy os presentamos algunos de los restaurantes de la Costa Brava donde podréis disfrutar de arroces para chuparse los dedos:
Restaurante Hotel El Far, Llafranc
Con el paso del tiempo los arroces «socarrados» de este restaurante hotel se han hecho súper populares en la Costa Brava; digamos que han encontrado el punto perfecto entre melosidad y horneado. Su variedad y el compromiso adquirido con el producto de proximidad hacen que su terraza, una de las más grandes de la costa, se llene con facilidad. Algunos de nuestros arroces favoritos: rodaballo y gambitas, presa ibérica y ceps, gambas de Palamós y butifarra del Perol. Pónganse los baberos, por favor.
Solimar, Pals
Para algunos, las mejores paella de la Costa Brava. Su secreto es la combinación entre producto de calidad y técnica acumulada durante tres generaciones. En palabras de David, su propietario, para hacer un arroz se necesita «buen sofrito, caldo «fumet» excepcional y cebolla cocida a fuego lento». La carta contiene desde las paellas clásicas (mixta, bogavante, de marisco) hasta las más actuales, como la vegana, hecha con caldo vegetal. Para paladares que saben apreciar lo bueno de verdad.
Ses Paelles, Cadaqués
Supieron darle a Cadaqués algo de lo que no iba sobrado: una arrocería. A pesar de que en sus inicios era un chiringuito, en 2013 se conviertieron en restaurante. Su filosofía consiste en ofrecer solo arroces de pescado, ¡santa limitación! De erizos de mar; bogavante, cigalas y gambas; pescado del día; chipirones y gambas… y todo ellos sin cebolla. Un ejemplo de que con ideas claras y buen hacer, se pueden hacer los arroces con más carácter de la zona. Para los impulsivos: abierto los fines de semana hasta Semana Santa y de manera ininterrumpida de junio a septiembre.
León, Llafranc
No podemos dejar de mencionar este restaurante familiar (entre madre, abuela y nietos cubren todos los frentes), ubicado en segunda línea de mar, un establecimiento sin encanto aparente, en realidad esconde un tesoro: la calidad de sus arroces. Es muy recomendable para un día cualquiera, después de recorrer el camino de ronda que une Calella con Llafranc, sentarse en el interior fresco del León y degustar su paella mixta o su arroz caldoso de bogavante. ¡Palabra!
Ca l’Herminda, Port de la Selva
Este restaurante conoce todos los misterios de la paella, ¡lleva más de 50 años sirviéndolas! Su especialidad son los caldosos. Algunos de nuestros favoritos son el de cabra de mar, sepia con cigalas o gambs y mejillones. Con producto fresco y hecho al momento, Ca l’Hermida se ha ganado una legión de fans.
La Selvatana (Palamós), Garbet (Portbou), Can Parera (Viladamat), La llagosta (Llafranc)… son algunos de los restaurantes en los que también degustarás arroces que te quitarán el hipo y harán de tus días en la Costa Brava una experiencia que querrás repetir cada año.
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